Aunque no hay plazos oficiales, las previsiones más optimistas en el Ayuntamiento apuntan a que las obras de la primera fase del proyecto de integración del río Tajo en la ciudad de Toledo podrían comenzar muy a finales de este año o principios del próximo, después de superar todos los trámites administrativos necesarios.

Pero ni el secretario de Estado de Medio Rural y Agua, Josep Puxeu, y ni el alcalde de la ciudad, Emiliano García-Page, hablaron ayer de plazos de construcción durante la presentación de las actuaciones correspondientes a esa primera fase del proyecto, cuya inversión podría superar los 20 millones de euros, aportados por el Gobierno de España. Solamente se habló del plazo de seis meses que tienen los ganadores del concurso internacional de ideas, con el proyecto "Take me to the river" (llévame al río, en inglés), para realizar la redacción del proyecto.

Burgos & Garrido Arquitectos S. L. deberán incluir una senda peatonal por la margen derecha del río entre el Puente de Alcántara y el de San Martín, así como un salón fluvial con áreas de descanso, ocio y restauración. Además, se instalarán tres pasarelas vinculadas a instalaciones hidráulicas históricas que faciliten el acceso al río: pontón de Saelices, pontón de molino de la Nueva (junto al salón fluvial) y pontón de las ruinas de la presa Daicán.

También se procederá en esta primera fase a la recuperación y el tratamiento vegetal de las laderas, y se instalarán seis plataformas voladas sobre los miradores existentes en la carretera del valle (margen izquierda), ampliando también la superficie para el aparcamiento de vehículos. Asimismo, se recuperarán y se consolidarán las principales obras hidráulicas de valor histórico para ser visitadas y utilizadas como centros de interpretación o lugares de ocio.

Como estaba previsto en el concurso, Burgos & Garrido Arquitectos tendrán que incluir ideas aportadas por los dos proyectos finalistas: Tan cerca... Tan lejos", de Junquera Arquitectos, y "Mucho Tajo", de Espegel-Fisac Arquitectos y Beth Galí. La recuperación paisajística del Tajo a su paso por Toledo irá acompañada de una "buena calidad" del agua, porque, de lo contrario, sería un "negocio ruinoso para quienes nos dedicamos a la gestión pública", recalcó el secretario de Estado de Medio Rural y Agua, que estuvo acompañado de la directora general del Agua, Marta Moren, y del presidente de la Confederación Hidrográfica del Tajo, José María Macías.

Para mejorar la calidad del caudal, Puxeu resaltó que este año se construirán dos grandes depuradoras en la zoLas obras de la primera fase fueron presentadas en el patio del Ayuntamiento de Toledo na sur de Madrid, además de otras dos nuevas en Toledo. El secretario de Estado aseguró también que existe una "estrecha colaboración" con las autoridades europeas para lograr que en 2015 el caudal del Tajo por Toledo sea de calidad.

Las palabras de Puxeu fueron refrendadas en parte por el alcalde, quien afirmó que los niveles de calidad del agua del Tajo a su paso por la ciudad "están llegando mucho mejor, aunque es difícil verlo". García-Page pidió a los arquitectos un proyecto "claro y concreto". Y ante los quejas de algunos colectivos sociales, advirtió: "Que nadie piense que lo que se va a terminar ejecutando en Toledo sea milimétricamente lo que se dice en el proyecto. Ni siquiera en el proyecto que se termine redactándose, porque será sometido en su momento a la normativa de impacto ambiental, a la de protección visual, de paisaje y patrimonio".

Añadió que tras la redacción del proyecto se abrirá un proceso de debate público. "Aquello que sea más difícil de entender, más polémico o más difícil de justificar en un momento determinado, lo someteremos a una doble evaluación", dijo García-Page. El alcalde insistió en que los habitantes de la capital regional no quieren cemento ni inundar las riberas de calles, sino que "el ciudadano de Toledo se reconcilie con su río".

"Hoy puedo decir con más claridad que el sueño de recuperar nuestro río es un sueño posible y con financiación", concluyó García-Page, quien aclaró que no pretendía parafrasear al presidente de los Estados Unidos, Barack Hussein Obama.