Las últimas lluvias caídas en Navarra han provocado una parada generalizada en la recolección de cereales y leguminosas, si bien han resultado positivas para los cultivos de verano, según se desprende del último informe sobre el estado del campo elaborado por el departamento de Desarrollo Rural.

Las lluvias y tormentas, centradas en su mayoría en las comarcas Nord-Occidental, Pirineos, Cuenca de Pamplona, Tierra Estella y zona del Aragón de Navarra Media y Ribera Alta, han dejado valores pluviométricos acumulados de diversa intensidad, que van de los 5 a los 70 litros por metro cuadrado según zonas.

Estas precipitaciones han provocado una parada generalizada en la campaña de recolección de cereales y leguminosas en estas zonas, que se encuentra ya en su fase final, informa el Gobierno de Navarra en un comunicado.

La recogida de trigos de áreas del norte va cumpliendo las buenas expectativas que se habían creado sobre el cultivo, ya que los pesos específicos en líneas generales son correctos y los rendimientos medios llegan incluso a los 5.000 ó 6.000 kilos por hectárea en la Cuenca de Pamplona y Pirineos.

Respecto a los cultivos forrajeros, el agua recibida en parcelas de maíz forrajero de zonas de Los Valles, Sakana, Baztan y Erro llega en un muy buen momento.

Las plantas se encuentran en pleno crecimiento vegetativo y ya comenzaban a acusar la ausencia de humedad en suelo, por lo que estas lluvias van a permitir recobrar e impulsar el potencial de este cultivo.