Showers become critical situation in Guatemala
Tue, 31/08/2010
El más reciente parte de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (CONRED), al cierre del domingo, señala innumerables incidentes ocurridos en el país relacionados con la acción devastadora de las aguas.
Menciona, por ejemplo, 21 inundaciones provocadas sobre todo por el desbordamiento de ríos, las cuales se produjeron en los departamentos de Alta Verapaz, Escuintla, Huehuetenango, Izabal, Jutiapa, Petén, Quiché, Sacatepéquez, Sololá y Zacapa.
Igualmente, contabiliza 654 viviendas dañadas, de ellas 56 con severos daños, 29 derrumbes y deslizamientos de tierra, estos por el exceso de humedad acumulada en los suelos, y el consiguiente bloqueo de carreteras y caminos.
Esos deslaves son los culpables de la mayoría de las seis muertes informadas oficialmente hasta el momento en poco más de una semana, todas de niños y adolescentes, sepultados por sus viviendas y bajo toneladas de tierra.
Una de las consecuencias significativas de las enfurecidas corrientes de agua fluviales es el derrumbe de casi la mitad del puente que une a Guatemala con Honduras en una carretera internacional del nororiental departamento de Izabal.
Los diversos eventos, más el peligro inminente de otros, hicieron a la CONRED evacuar a las poblaciones en riesgo y a la fecha tres mil 614 personas son atendidas en más de medio centenar de albergues habilitados.
Estos estragos se unen a los arrastrados desde finales de mayo pasado por el paso de la tormenta tropical Agatha, cuando se registró el grueso de los más de 180 decesos ocasionados por la presente temporada llamada invernal.
Para agravar aún más la situación, la CONRED acusa el agotamiento paulatino de sus recursos y la falta de financiamiento para adquirir lo suficiente en aras de atender a los guatemaltecos afectados.
De acuerdo con los pronósticos del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología, las precipitaciones pluviales continuarán sobre una buena parte del país en los próximos días.
Menciona, por ejemplo, 21 inundaciones provocadas sobre todo por el desbordamiento de ríos, las cuales se produjeron en los departamentos de Alta Verapaz, Escuintla, Huehuetenango, Izabal, Jutiapa, Petén, Quiché, Sacatepéquez, Sololá y Zacapa.
Igualmente, contabiliza 654 viviendas dañadas, de ellas 56 con severos daños, 29 derrumbes y deslizamientos de tierra, estos por el exceso de humedad acumulada en los suelos, y el consiguiente bloqueo de carreteras y caminos.
Esos deslaves son los culpables de la mayoría de las seis muertes informadas oficialmente hasta el momento en poco más de una semana, todas de niños y adolescentes, sepultados por sus viviendas y bajo toneladas de tierra.
Una de las consecuencias significativas de las enfurecidas corrientes de agua fluviales es el derrumbe de casi la mitad del puente que une a Guatemala con Honduras en una carretera internacional del nororiental departamento de Izabal.
Los diversos eventos, más el peligro inminente de otros, hicieron a la CONRED evacuar a las poblaciones en riesgo y a la fecha tres mil 614 personas son atendidas en más de medio centenar de albergues habilitados.
Estos estragos se unen a los arrastrados desde finales de mayo pasado por el paso de la tormenta tropical Agatha, cuando se registró el grueso de los más de 180 decesos ocasionados por la presente temporada llamada invernal.
Para agravar aún más la situación, la CONRED acusa el agotamiento paulatino de sus recursos y la falta de financiamiento para adquirir lo suficiente en aras de atender a los guatemaltecos afectados.
De acuerdo con los pronósticos del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e Hidrología, las precipitaciones pluviales continuarán sobre una buena parte del país en los próximos días.