(("recursos hidricos" "reserva hidrica" embalse desembalse embalses "obras hidraulicas" hidrologia hidrologico cuenca hidrologicos sequia riegos inundacion inundaciones pantano precipitaciones hidrologia hidroelectrico hidroelectricidad hidroelectrica trasvase desalacion desaladora legionella fluvial) ((agua aguas) AND (abastecimiento presa cuenca presas saneamiento))) NOT "palabras secretario"&fnamesection=ANY(clasificados publicidad servicios deportes)&fieldbool=NOT+fnamesection

El año pluviométrico acaba de finalizar y ha sido, de largo, el de más precipitaciones de la última década. Computado el periodo entre el 1 de octubre de 2009 y el 30 de septiembre de 2010, se han recogido 710 litros por metro cuadrado, una cifra que supera claramente al segundo mejor registro del siglo XXI -el año pluviométrico 2002-2003, en el que cayeron 584,4 litros- y que es una constatación, en forma de lluvia, de que la sequía que amenazó entre los años 2004 y 2008 ha quedado muy atrás. Según datos de Emasagra, el mes en el que se registraron más precipitaciones fue el de diciembre de 2009, con 181 litros. En ese mes se sucedieron los primeros temporales en la provincia, una situación que se prolongó hasta marzo y que, además de numerosísimos daños materiales en la provincia, provocó una víctima mortal. Fue a principios de enero, en Valderrubio, cuando falleció una mujer en su casa tras desbordarse el arroyo Escóznar. Los meses de febrero (132,5 litros) y enero (126,8) fueron, por ese orden, los más abundantes en lluvias, después del de diciembre. Fue, en definitiva, un invierno metido en agua. Desde luego muchísimo más que sus precedentes. En el año pluviométrico 2008-2009. Fueron 389 litros frente a 177. Claro que los resultados son mucho más demoledores si se los compara con el año 2004-2005, en el que, en ese periodo citado, sólo cayeron 61 litros. Pero es que en marzo también hubo registros casi de récord. Sus 84 litros suponen la segunda posición en la clasificación de la década, sólo superados por los 104,5 de 2002 pero por supuesto muy por encima de los de 2008 (27) y 2007 (9,3). En primavera llovió de forma más constante que el año pasado, aunque los registros totales no son superiores. Cayeron aproximadamente 76 litros frente a los 95 del pasado ejercicio, pero la diferencia fue que entonces hubo un mes de abril increíble (85 litros) seguido de dos meses casi secos, en los que sólo cayeron dos litros. Incluso en verano ha habido mejores cifras que de costumbre. Los 25 litros registrados entre julio y agosto suponen la segunda mejor marca del siglo, por detrás de los 32,4 de 2003. Cabe destacar, en ese sentido, que en esos meses de 2004 y 2005 no cayó ni una gota. Fueron los peores años de sequía, un periodo que después se repitió en el año pluviométrico 2007-2008 (324 litros en total) y que llevaron a adoptar medidas excepcionales, fundamentalmente la apertura de pozos para aprovechar el agua del subsuelo. En Granada ya no se utilizan, ni tampoco se cobra el canon de sequía. Todo esto en lo que respecta a las lluvias. Pero Emasagra también proporciona datos sobre temperaturas que reflejan que ha sido uno de los inviernos más fríos de la década y que, en el otro lado de la balanza, dejan el mes de julio más caluroso, junto con el de 2008. El mes más frío fue el de enero, con una mínima de 5 grados bajo cero. Idéntico registro se observó en los meses de diciembre de 2006 y 2007. Pero peor fue lo de enero de 2007, cuando se bajó hasta los -7. El verano fue cálido, pero no muy cálido, como sucedió en el resto de Andalucía. La aclaración la hace el director de la Agencia Española de Meteorología (Aemet) en su delegación de Málaga, José María Sánchez, que detalló que aunque no estamos en un año de fenómenos atmosféricos como el conocido Niño, que aumenta la temperatura del agua de los océanos, sí ha habido un régimen general de viento de Levante, que hace que el agua se caliente algo más. Eso habrá influido en que en julio se llegara a los 43 grados, temperatura que también se alcanzó en julio y agosto de 2008 pero todavía no superada en lo que va de siglo. En agosto se alcanzaron los 38, un grado más que el año pasado. Y la mínima fue de 14. Por lo que respecta al presente, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha activado para hoy la alerta amarilla por riesgo de fuertes vientos que pueden alcanzar los 70 kilómetros por hora.


El año pluviométrico acaba de finalizar y ha sido, de largo, el de más precipitaciones de la última década. Computado el periodo entre el 1 de octubre de 2009 y el 30 de septiembre de 2010, se han recogido 710 litros por metro cuadrado, una cifra que supera claramente al segundo mejor registro del siglo XXI -el año pluviométrico 2002-2003, en el que cayeron 584,4 litros- y que es una constatación, en forma de lluvia, de que la sequía que amenazó entre los años 2004 y 2008 ha quedado muy atrás.

Según datos de Emasagra, el mes en el que se registraron más precipitaciones fue el de diciembre de 2009, con 181 litros. En ese mes se sucedieron los primeros temporales en la provincia, una situación que se prolongó hasta marzo y que, además de numerosísimos daños materiales en la provincia, provocó una víctima mortal. Fue a principios de enero, en Valderrubio, cuando falleció una mujer en su casa tras desbordarse el arroyo Escóznar. Los meses de febrero (132,5 litros) y enero (126,8) fueron, por ese orden, los más abundantes en lluvias, después del de diciembre. Fue, en definitiva, un invierno metido en agua. Desde luego muchísimo más que sus precedentes. En el año pluviométrico 2008-2009. Fueron 389 litros frente a 177. Claro que los resultados son mucho más demoledores si se los compara con el año 2004-2005, en el que, en ese periodo citado, sólo cayeron 61 litros.

Pero es que en marzo también hubo registros casi de récord. Sus 84 litros suponen la segunda posición en la clasificación de la década, sólo superados por los 104,5 de 2002 pero por supuesto muy por encima de los de 2008 (27) y 2007 (9,3). En primavera llovió de forma más constante que el año pasado, aunque los registros totales no son superiores. Cayeron aproximadamente 76 litros frente a los 95 del pasado ejercicio, pero la diferencia fue que entonces hubo un mes de abril increíble (85 litros) seguido de dos meses casi secos, en los que sólo cayeron dos litros.

Incluso en verano ha habido mejores cifras que de costumbre. Los 25 litros registrados entre julio y agosto suponen la segunda mejor marca del siglo, por detrás de los 32,4 de 2003. Cabe destacar, en ese sentido, que en esos meses de 2004 y 2005 no cayó ni una gota. Fueron los peores años de sequía, un periodo que después se repitió en el año pluviométrico 2007-2008 (324 litros en total) y que llevaron a adoptar medidas excepcionales, fundamentalmente la apertura de pozos para aprovechar el agua del subsuelo. En Granada ya no se utilizan, ni tampoco se cobra el canon de sequía.

Todo esto en lo que respecta a las lluvias. Pero Emasagra también proporciona datos sobre temperaturas que reflejan que ha sido uno de los inviernos más fríos de la década y que, en el otro lado de la balanza, dejan el mes de julio más caluroso, junto con el de 2008.

El mes más frío fue el de enero, con una mínima de 5 grados bajo cero. Idéntico registro se observó en los meses de diciembre de 2006 y 2007. Pero peor fue lo de enero de 2007, cuando se bajó hasta los -7.

El verano fue cálido, pero no muy cálido, como sucedió en el resto de Andalucía. La aclaración la hace el director de la Agencia Española de Meteorología (Aemet) en su delegación de Málaga, José María Sánchez, que detalló que aunque no estamos en un año de fenómenos atmosféricos como el conocido Niño, que aumenta la temperatura del agua de los océanos, sí ha habido un régimen general de viento de Levante, que hace que el agua se caliente algo más.

Eso habrá influido en que en julio se llegara a los 43 grados, temperatura que también se alcanzó en julio y agosto de 2008 pero todavía no superada en lo que va de siglo. En agosto se alcanzaron los 38, un grado más que el año pasado. Y la mínima fue de 14. Por lo que respecta al presente, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) ha activado para hoy la alerta amarilla por riesgo de fuertes vientos que pueden alcanzar los 70 kilómetros por hora.