Save the Children warns that 10 million children still suffer from flooding and are exposed to cholera
Fri, 29/10/2010
La organización Save the Children alertó este jueves de que de unos diez millones de niños siguen sufriendo las consecuencias de "las peores inundaciones de la historia de Pakistán" y, además, están ahora expuestos al riesgo del cólera.
En un comunicado, la organización no gubernamental aseguró que Pakistán afronta "una creciente crisis de supervivencia infantil", después de que las inundaciones acabaran con la vida de "1.600 personas" y "más de 20 millones", la mitad de ellas "niños y niñas" sufrieran las consecuencias de ese fenómeno meteorológico.
La ONG advirtió de que, "en las zonas afectadas por las inundaciones", "los niños y niñas son los más vulnerables a las enfermedades mortales" y aseguró que ahora están viviendo en Pakistán "sin agua potable, refugio ni asistencia sanitaria", al tiempo que "el número de niños y niñas con desnutrición severa continúa en aumento".
Según las estimaciones de Save The Children, el cólera amenaza en la actualidad a "siete millones de personas" en el país asiático, la mitad de las cuales son menores de edad. "Las inundaciones han cubierto una quinta parte del territorio del país y han dejado a más 7 millones de personas sin hogar. Pueblos de la cuenca del río Indo están completamente arrasados y gran parte de la provincia de Sindh está aún bajo el agua", explicó.
La ONG señaló que "más de 7.000 escuelas han quedado destruídas y otras miles están siendo utilizadas como refugios temporales", por lo que "pasará mucho tiempo hasta que los niños y niñas puedan volver a clase".
La coordinadora de Emergencias de Save the Children, Bárbara Mineo, aseguró que "las familias", "muchas de ellas ya pobres antes de las inundaciones", "ahora se han quedado sin hogar". "Lo han perdido todo y no tienen medios para alimentar a sus hijos e hijas, reconstruir sus casas, sembrar o seguir adelante con su vida sin ayuda", aseguró.
Save the Children ha puesto en marcha programas especializados para hacer frente a la creciente tasa de desnutrición aguda en niños, una condición que puede suponer un grave peligro para sus vidas. A través de clínicas móviles y fijas, la ONG ya ha proporcionado ayuda médica a "más de 300.000 niños, niñas y adultos", a los que ha proporcionado tratamiento contra la malaria y la neumonía, "las causas más comunes de mortalidad infantil".
"Nos estamos moviendo tan rápido como podemos para prestar asistencia. La labor, sin embargo, es enorme y requiere el continuo apoyo de la Comunidad Internacional", explicó la coordinadora de Emergencias de Save the Children.
Hasta este jueves, 28 de octubre, Save the Children ha proporcionado ayuda a más de 1.698.000 personas afectadas por las inundaciones, a las que ha proporcionado atención médica de emergencia, distribución de materiales para refugios, artículos de higiene, kits de hogar, bolsista de purificación de agua, alimento, educación y actividades de saneamiento. La ONG está trabajando en las cuatro provincias afectadas por las inundaciones en colaboración con el Gobierno de Pakistán.
En un comunicado, la organización no gubernamental aseguró que Pakistán afronta "una creciente crisis de supervivencia infantil", después de que las inundaciones acabaran con la vida de "1.600 personas" y "más de 20 millones", la mitad de ellas "niños y niñas" sufrieran las consecuencias de ese fenómeno meteorológico.
La ONG advirtió de que, "en las zonas afectadas por las inundaciones", "los niños y niñas son los más vulnerables a las enfermedades mortales" y aseguró que ahora están viviendo en Pakistán "sin agua potable, refugio ni asistencia sanitaria", al tiempo que "el número de niños y niñas con desnutrición severa continúa en aumento".
Según las estimaciones de Save The Children, el cólera amenaza en la actualidad a "siete millones de personas" en el país asiático, la mitad de las cuales son menores de edad. "Las inundaciones han cubierto una quinta parte del territorio del país y han dejado a más 7 millones de personas sin hogar. Pueblos de la cuenca del río Indo están completamente arrasados y gran parte de la provincia de Sindh está aún bajo el agua", explicó.
La ONG señaló que "más de 7.000 escuelas han quedado destruídas y otras miles están siendo utilizadas como refugios temporales", por lo que "pasará mucho tiempo hasta que los niños y niñas puedan volver a clase".
La coordinadora de Emergencias de Save the Children, Bárbara Mineo, aseguró que "las familias", "muchas de ellas ya pobres antes de las inundaciones", "ahora se han quedado sin hogar". "Lo han perdido todo y no tienen medios para alimentar a sus hijos e hijas, reconstruir sus casas, sembrar o seguir adelante con su vida sin ayuda", aseguró.
Save the Children ha puesto en marcha programas especializados para hacer frente a la creciente tasa de desnutrición aguda en niños, una condición que puede suponer un grave peligro para sus vidas. A través de clínicas móviles y fijas, la ONG ya ha proporcionado ayuda médica a "más de 300.000 niños, niñas y adultos", a los que ha proporcionado tratamiento contra la malaria y la neumonía, "las causas más comunes de mortalidad infantil".
"Nos estamos moviendo tan rápido como podemos para prestar asistencia. La labor, sin embargo, es enorme y requiere el continuo apoyo de la Comunidad Internacional", explicó la coordinadora de Emergencias de Save the Children.
Hasta este jueves, 28 de octubre, Save the Children ha proporcionado ayuda a más de 1.698.000 personas afectadas por las inundaciones, a las que ha proporcionado atención médica de emergencia, distribución de materiales para refugios, artículos de higiene, kits de hogar, bolsista de purificación de agua, alimento, educación y actividades de saneamiento. La ONG está trabajando en las cuatro provincias afectadas por las inundaciones en colaboración con el Gobierno de Pakistán.