El Gobierno de Cantabria ha licitado en 100.250 euros el servicio de toma de muestras y medición de parámetros para el Laboratorio del Centro de Investigaciones del Medio Ambiente (CIMA), dependiente de la Consejería de Medio Ambiente.

Se trata de un contrato orientado a la "vigilancia y control" de distintos parámetros ambientales, especialmente aquellos relacionados con el agua, que permiten recabar datos para realizar estudios e investigaciones o para la concesión de Autorizaciones Ambientales Integradas, por ejemplo.

Según información del CIMA, facilitada a Europa Press, a través de este servicio se realizará la toma de "muestras de campo", que en el caso del agua afecta a parámetros físico-químicos como el Ph, el oxígeno disuelto, etcétera. Estos factores permiten determinar el nivel de contaminación de las aguas o la presencia o no de vertidos.

Las campañas de medición se realizan por toda la región, y son más intensas en aquellas zonas de mayor presencia de industrias, como la cuenca del Besaya. Estas muestras también se toman cuando hay actuaciones puntuales por una denuncia o una llamada de emergencia.
En el caso del aire, se miden las emisiones de chimeneas principalmente, aunque también se toman muestras si hay una llamada puntual de emergencia de la población, quejándose de un olor determinado, por ejemplo.

Y respecto al suelo, se mide la presencia de residuos y nivel de contaminación.

El contrato se adjudicará por procedimiento abierto y tramitación urgente. Tendrá una duración de un año y será renovable por otros doce meses.

Las ofertas podrán presentarse en el Servicio de Contratación y Compras de la Consejería de Presidencia y Justicia del Gobierno de Cantabria, hasta las 13 horas del próximo 9 de diciembre.