Feragua considers that to reduce the use of the water jeopardizes the future of irrigation
Tue, 12/04/2011
La Federación de Regantes de Andalucía (Feragua) considera que reducir las dotaciones de agua para riego a los agricultores no hace sino "hipotecar el futuro de los cultivos de regadío" en la comunidad autónoma, ya que les resta competitividad.
En declaraciones a Efe, la presidenta de Feragua, Margarita Bustamante, ha precisado que el agua es necesaria para que los productos "crezcan en cantidad y sobre todo en calidad, un factor muy necesario para competir en los mercados internacionales".
Ante los recortes en dotaciones que la administración autonómica pretende efectuar con la puesta de marcha de Planes Hidrológicos como los del Guadalquivir o el Tinto-Odiel-Piedras entre otros, ha dicho que "no se debe confundir el ahorro y la mejora de la eficiencia de las instalaciones, con la autorización de unas dotaciones deficitarias e insuficientes para las demandas de agua de los distintos cultivos".
Los regantes, ha precisado, "están comprometidos con el objetivo de favorecer el desarrollo sostenible, que optimice el uso de los recursos naturales disponibles, y que al mismo tiempo garantice el futuro de una agricultura competitiva y de calidad".
"No se trata de desperdiciar agua, muchos agricultores ya han incorporado a sus cultivos las tecnología más puntera para hacer un uso más eficiente del agua, sino de conceder la necesaria para que logren una cosechas de calidad que aporten competitividad en el mercado europeo", ha apuntado.
En declaraciones a Efe, la presidenta de Feragua, Margarita Bustamante, ha precisado que el agua es necesaria para que los productos "crezcan en cantidad y sobre todo en calidad, un factor muy necesario para competir en los mercados internacionales".
Ante los recortes en dotaciones que la administración autonómica pretende efectuar con la puesta de marcha de Planes Hidrológicos como los del Guadalquivir o el Tinto-Odiel-Piedras entre otros, ha dicho que "no se debe confundir el ahorro y la mejora de la eficiencia de las instalaciones, con la autorización de unas dotaciones deficitarias e insuficientes para las demandas de agua de los distintos cultivos".
Los regantes, ha precisado, "están comprometidos con el objetivo de favorecer el desarrollo sostenible, que optimice el uso de los recursos naturales disponibles, y que al mismo tiempo garantice el futuro de una agricultura competitiva y de calidad".
"No se trata de desperdiciar agua, muchos agricultores ya han incorporado a sus cultivos las tecnología más puntera para hacer un uso más eficiente del agua, sino de conceder la necesaria para que logren una cosechas de calidad que aporten competitividad en el mercado europeo", ha apuntado.