Invented a mini recyclable plastic prey that reclaims the water for irrigation and avoids environmental impacts
Mon, 04/07/2011
Un equipo del Departamento de Ingeniería de Sistemas y Automática de la Universidad de Valladolid (UVA) cuenta con la patente de una mini presa de plástico reciclable que permite el ahorro de agua de regadío y energía así como contribuye a la conservación del medio ambiente, ya que su utilización evita que se degrade el cauce, se inunden los valles y se generen miles de toneladas de escombros.
Esta construcción, pensada para represar pequeños cauces, es capaz de ajustarse a diferentes cuencas para la retención de aguas de escorrentía de bajo caudal, de forma que se puede reutilizar el líquido acumulado para riego en zonas de secano o de regadío y contribuir así a solventar el problema del déficit de agua en la agricultura española.
De hecho, según explica Ramiro Merino, responsable del equipo investigador, la idea surge tras observar cómo tras las lluvias el agua se pierde de forma rápida y los cauces se quedan secos uno o dos días después.
"Su finalidad es aumentar la permanencia del agua en los terrenos, la superficie de terrenos expuestos al agua, y favorecer la infiltración en los suelos. No construimos embalses, sino que pretendemos que el embalse sea el subsuelo", apunta Merino.
Una de las peculiaridades de este sistema, aparte de su pequeño tamaño, es que está elaborado con polietileno procedente de residuos sólidos. Así, el invento reaprovecha todos esos plásticos que hoy se tiran a la basura --admite gran variedad de polímeros-- para las piezas principales, una central en forma de 'U' con rebosadero y aliviadero, y dos laterales colocadas a ambos lados de la 'U' para alcanzar el ancho necesario de la cuenca del arroyo donde se ubique. Su fijación en el terreno se realiza con basamentos de hormigón.
"Tiene la ventaja de que se da utilidad al plástico y se evita la contaminación ambiental. Si además añadimos la elevación de todo el nivel de la capa freática, estamos hablando de la recuperación de la capa forestal y la capa verde de la tierra", señala Merino.
Esta creación cuenta además con un sistema de telecontrol vía SMS que permite conocer el nivel de agua de toda la cuenca. Así, el módulo central dispone de un alojamiento para ubicar un instrumento de medición denominado 'limnímetro' que se encuentra monitorizado por un equipo de control que manda la información a una central, alertando de posibles caudales máximos.
Esta pequeña instalación tiene también la ventaja de su bajo coste, no superior a 20.000 euros y muy por debajo de las grandes presas convencionales. No obstante, el equipo de la UVA se encuentra a la espera de que alguna empresa comercialice su patente a nivel industrial.
Esta construcción, pensada para represar pequeños cauces, es capaz de ajustarse a diferentes cuencas para la retención de aguas de escorrentía de bajo caudal, de forma que se puede reutilizar el líquido acumulado para riego en zonas de secano o de regadío y contribuir así a solventar el problema del déficit de agua en la agricultura española.
De hecho, según explica Ramiro Merino, responsable del equipo investigador, la idea surge tras observar cómo tras las lluvias el agua se pierde de forma rápida y los cauces se quedan secos uno o dos días después.
"Su finalidad es aumentar la permanencia del agua en los terrenos, la superficie de terrenos expuestos al agua, y favorecer la infiltración en los suelos. No construimos embalses, sino que pretendemos que el embalse sea el subsuelo", apunta Merino.
Una de las peculiaridades de este sistema, aparte de su pequeño tamaño, es que está elaborado con polietileno procedente de residuos sólidos. Así, el invento reaprovecha todos esos plásticos que hoy se tiran a la basura --admite gran variedad de polímeros-- para las piezas principales, una central en forma de 'U' con rebosadero y aliviadero, y dos laterales colocadas a ambos lados de la 'U' para alcanzar el ancho necesario de la cuenca del arroyo donde se ubique. Su fijación en el terreno se realiza con basamentos de hormigón.
"Tiene la ventaja de que se da utilidad al plástico y se evita la contaminación ambiental. Si además añadimos la elevación de todo el nivel de la capa freática, estamos hablando de la recuperación de la capa forestal y la capa verde de la tierra", señala Merino.
Esta creación cuenta además con un sistema de telecontrol vía SMS que permite conocer el nivel de agua de toda la cuenca. Así, el módulo central dispone de un alojamiento para ubicar un instrumento de medición denominado 'limnímetro' que se encuentra monitorizado por un equipo de control que manda la información a una central, alertando de posibles caudales máximos.
Esta pequeña instalación tiene también la ventaja de su bajo coste, no superior a 20.000 euros y muy por debajo de las grandes presas convencionales. No obstante, el equipo de la UVA se encuentra a la espera de que alguna empresa comercialice su patente a nivel industrial.